A los que huelen sangre y sienten placer.
A los que comen de las trampas,
en bamboleantes vuelos, ridiculos tramperos!
A los que sortean los crucifijos de hoy,
entre inquisiciones delirantes del progreso
y los bestiales policias del pensamiento,
les rindo la noche, la luna y los rayos!
La tormenta llevara mar adentro,
el veneno de nuestras gargantas
acuciadas, entumecidas, sofocadas
en el paño ferviente de la unica verdad,
la verdad y nada mas que la mentira,
de la patada asnal del moralizador serial.
Parcos burros llevan a la hoguera
pecadores manatiados en sus alforjas,
Pecadores! demonios, indomitos fascistas,
llevan en la espalda, la marca del pecado.
El pecado original de no estar de acuerdo.
(To Xavier One Thousand Ey)
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